domingo, 12 de junio de 2011

Opinión personal sobre la ruta.

Hay que tener claro que Pedales de León es una ruta dura y exigente tanto a nivel físico como técnico. Es una ruta en la que, o bien estás subiendo, o bien estás bajando. No hay llanos y tanto las subidas como las bajadas son de pendientes considerables. A cambio de este esfuerzo, te recompensará con muchas imágenes que quedarán grabadas en tu retina (y en la tarjeta de tu cámara digital).

Ruta recomendable 100%.

Etapa 4. La Mata de Monteagudo - Cistierna.


La etapa de hoy, a priori, se presentaba sencilla ya que solo tenía 25 km. pero debido a los kilómetros acumulados en nuestras piernas, no iba a ser tarea de coser y cantar. Tras salir temprano de la Mata de Monteagudo comenzamos a subir el puerto más importante de la etapa de hoy. Durante ésta, nos hemos ido encontrando parajes inhóspitos incluyendo incluso algún pueblo abandonado.


Tras hacer unos cuantos sube-bajas sin mucha importancia, comenzamos la bajada hasta Cistierna, lugar al que llegamos sobre la 1 de la tarde. Nos dirigimos a la oficina de Pedales de León, donde nos recibió Eduardo, para hacernos entrega de los maillots de finishers y una bolsa con regalos típicos de la zona.

Tras adecentarnos en el hotel, y por recomendación de Eduardo, fuimos a comer al restaurante La Tejera, a unos 2 kilómetros de Cistierna. Un 10 para el lugar.

Por la tarde, después de haber hecho una pequeña y merecidísima siesta, preparamos las bicis en sus cajas para el regreso a nuestras casas. También estuvimos charlando e intercambiando sensaciones con gente del grupo de Lérida con el que coincidimos en varias ocasiones durante la ruta.

Perfil de la etapa de hoy.
Datos del pulsómetro.
* Pulsaciones medias: 129
* Pulsaciones máximas: 169
* Kcalorías consumidas: 1985
* Grasa consumida: 61,2 grm

Etapa 3. Posada de Valdeón - La Mata de Monteagudo


La etapa de hoy se puede resumir en 2 palabras; larga y dura. Teníamos por delante unos 80 km con 4 importantes ascensos. Nada más de salir de Posada de Valdeón, comenzamos a ascender al Collado de Pandetrave, una ascensión mixta entre pistas de tierra y asfalto. Nada más coronar dicho puerto aprovechamos para sacarnos una foto con las impresionantes vistas que se nos ofrecían desde el mirador.

Desde este puerto comenzamos la bajada hacia el siguiente punto de control donde aprovechamos tomar algo para recuperar fuerzas. Tras prepararnos, iniciamos otro ascenso con la dureza habitual de las subidas anteriores. Como es la tónica de esta ruta, los paisajes que nos deleitan la vista son impresionantes. Un ejemplo es la siguiente foto, de una pequeña cascada que nos encontramos en el camino.
Tras bajar este collado aprovechamos para parar a almorzar en el bar restaurante Las Portillas en Besande, y como es costumbre en toda la ruta, la comida perfecta. A continuación comenzamos a subir otro collado más, para luego hacer una bajada larga hasta Morgovejo.
A partir de aquí, nos quedaría una última subida importante y luego unos pequeños sube-baja para llegar a La Mata de Monteagudo. Aquí nos quedamos a dormir en el CTR La Velilla. Es una casa de turismo rural en medio del monte, con una paz a su alrededor casi mística.

Tras asearnos nos dispusimos a cenar con una deliciosa cena.

Este es el perfil de la etapa de hoy.

Datos del pulsómetro.
* Pulsaciones medias: 135
* Pusaciones máximas: 187
* Kcalorías consumidas: 5747
* Grasas quemadas: 142, 4 grm

viernes, 10 de junio de 2011

Etapa 2. Salamón - Posada de Valdeón.

Hemos terminado la 2ª etapa y se puede resumir en una palabra, DURA. Hoy nos tocaba subir "sólo" 2 puertos por lo que a priori la etapa no resultaría muy complicada, pero nada más lejos de la realidad. Tras levantarnos y desayunar salimos dirección a coronar el primer puerto. La subida, larga y tendida, no supuso mucho esfuerzo pero lo que no podíamos imaginar era lo que nos depararía la bajada.

Toda la bajada, desde el puerto del Zalambral, discurría por un sendero en medio del bosque. El primer tramo de fuerte bajada y con terreno muy húmedo lo disfrutamos como niños, pero el resto de la bajada se complicó con unas trialeras muy técnicas que sumadas al mal estado del terreno hizo que lo bajásemos andando con las bicis a cuestas. Las zapatillas de la bicicleta eran una mezcla de cuero y barro. En la siguiente foto se ve como se hundían las ruedas en los charcos de barro, en este caso, la de Marcel.

Sobra decir que los pies los llevábamos totalmente empapados, tanto es así, que en muchos de los arroyos que cruzamos, aprovechábamos para meter los pies y limpiar las zapatillas un poco.

Tras por fin llegar al final de la bajada aprovechamos para comer en Soto de Jambre. Aquí recuperamos fuerzas para afrontar la subida que nos esperaba. Teníamos que subir al puerto de Panderueda, unos 9 kilómetros de subida. La fuerte pendiente de subida (alcanzamos un 31% de desnivel) unida al barrizal del terreno hizo que tuviésemos que subir unos 5 kilómetros a pie. Que divertido es esto, cuando la bicicleta con las ruedas totalmente llenas de barro se pega al terreno como una lapa, y parece que estés empujando un tractor. Llegamos a la parte alta del puerto totalmente exhaustos y con las fuerzas bajo mínimos. A partir de aquí y con una bruma que se estaba metiendo teníamos unos 12 kilómetros de bajada hasta Posada de Valdeón, donde nos alojaríamos en la Pensión Begoña. Tras limpiar las bicicletas para quitarles las 4 toneladas de barro que llevaban encima, nos duchamos y nos fuimos a cenar. Crema de verduras, Jabalí guisado y de postre, flan casero.


Este es el perfil que nos ha salido de la etapa.

Estos son los datos de mi pulsómetro.
* Pulsaciones media: 137
* Pulsaciones máximas: 180
* Kcalorías gastadas: 5736
* Gramos de grasa quemados: 153,7

jueves, 9 de junio de 2011

Etapa 1. Concluida.

Hoy nos hemos levantado temprano para desayunar e intentar salir lo antes posible. Al estar en el mismo hotel que otro grupo grupo de ciclistas leridanos, al final, la salida se retrasó hasta las 9:45.
Tras tomar la salida desde el hotel nos dirigimos, guiados por el chico de la organización hasta la pista de tierra. El comienzo fue bastante sencillo pero esto no iba a ser la tónica de la etapa. Una vez que nos separamos del grupo de leridanos, pudimos ir a nuestro ritmo, más relajado que el del otro grupo.
Los pueblos por los que pasamos fueron Yuguero, Sabero (primer control de paso del rutómetro), Velila de Valdoré, Crémenes (segundo control de paso), Corniero, Primajas, Reyero, Lois y Salamón (donde hacemos noche).


Al final, la etapa ha sido bastante dura ya que hemos subido 5 collados de "fuerte subida", acumulado unos 2500 m. de ascensión positiva acumulada y totalizado unos 66 km. A lo largo de la ruta hemos cogido muchos senderos preciosos, visto muchas vacas e incluso un pequeño zorro, que al vernos ha salido huyendo.

Desde Lois nos hemos desviado a Salamón donde teníamos el alojamiento y por las ganas que teníamos de llegar, hemos bajado bastante rápido. El alojamiento es "La Hospedería de Salamón", un sitio encantador con un entorno impresionante. Para cenar y recuperar fuerzas nos han puesto una tabla de embutidos caseros, ensaladas y solomillo de corzo. Sobra decir que todo estaba delicioso.

Esta noche descansaremos para tomar con fuerzas la etapa de mañana.

Esta es la gráfica del perfil de la ruta y más abajo unos daos curiosos de mi pulsómetro.


* Pulsaciones media: 149
* Pulsaciones máximas: 196
* Kcalorías consumidas: 5543
* Gramos de grasa quemados: 111,5

miércoles, 8 de junio de 2011

Hemos llegado a Cistierna, punto de origen de la ruta.



Esta mañana a las 7:30 horas hemos salido del aeropuerto Tenerife Norte con destino Madrid. Sobre las 11:30 hemos aterrizado y afortunadamente nos ha llegado todo el equipaje, incluidas las bicis.
Tras unirnos a Marcel, que nos esperaba en nuestra puerta de llegadas, fuimos a buscar la furgoneta, la hemos cargado con las bicis y tomado rumbo a Cistierna. Nos quedaban por delante unos 400 kilómetros.


Aprovechamos un restaurante de carretera cerca de Aranda de Duero para almorzar para luego pegarnos los 300 ilómetros que faltaban para Cistierna. Tras unas cuantas horas, por fin llegamos a Cistierna. Pasamos por la base de la organización de Pedales de Leon para recoger el rutómetro y recibir una serie de explicaciones por parte de la organización.
Tras esto, fuimos al hotel Rio Esla y nos pusimos a montar las bicicletas para dejarlas listas para mañana. Cuando terminamos, aprovechamos para dar una vuelta al pueblo y luego cenar.

Esto es lo que ha dado el día de hoy.

Mañana más.